Psalms 78:43-68

43Cuando hizo Sus señales en Egipto a,

Y Sus prodigios b en el campo de Zoán.
44Convirtió en sangre sus ríos c

Y sus corrientes, y no pudieron beber.
45Envió entre ellos enjambres de moscas d que los devoraban,

Y ranas que los destruían e.
46Entregó también sus cosechas al saltamontes f,

Y el fruto de su trabajo a la langosta g.
47Destruyó sus viñas con granizo h,

Y sus sicómoros con escarcha.
48Entregó también al granizo sus ganados i,

Y sus rebaños a los rayos.
49Envió sobre ellos el ardor de Su ira j,

Furia, indignación y angustia,

Un ejército de ángeles destructores.
50Preparó senda para Su ira;

No libró sus almas de la muerte,

Sino que entregó sus vidas a la plaga k,
51E hirió a todos los primogénitos en Egipto l,

Las primicias m de su virilidad en las tiendas de Cam n.
52Pero a Su pueblo lo sacó como a ovejas o,

Como a rebaño los condujo en el desierto p;
53Los guió con seguridad q, de modo que no temieron,

Pero el mar se tragó a sus enemigos r.

54Los trajo, pues, a Su tierra santa s,

A esta tierra montañosa t que Su diestra había adquirido u.
55Y expulsó a las naciones v de delante de ellos;

Las repartió con medida por herencia w,

E hizo habitar en sus tiendas a las tribus de Israel.
56Sin embargo, ellos pusieron a prueba x y provocaron al Dios Altísimo y,

Y no guardaron Sus testimonios,
57Sino que se volvieron atrás y fueron desleales como sus padres z;

Se desviaron como arco engañoso aa.
58Lo provocaron ab con sus lugares altos ac,

Y despertaron Sus celos ad con sus imágenes talladas ae.
59Al oírlo Dios, se indignó af,

Y aborreció a Israel en gran manera ag.
60Abandonó la morada en Silo ah,

La tienda que había levantado entre los hombres,
61Y entregó al cautiverio Su poderío ai,

Y Su gloria en manos del adversario aj.
62Entregó también Su pueblo a la espada ak,

Y se indignó contra Su heredad.
63El fuego consumió al a sus jóvenes,

Y no tuvieron canciones de bodas sus vírgenes am.
64Sus sacerdotes cayeron a espada an,

Y sus viudas no pudieron llorar ao.

65Entonces despertó el Señor como de un sueño ap,

Como guerrero aq vencido por el vino,
66E hizo retroceder a Sus adversarios ar,

Poniendo sobre ellos una afrenta perpetua.
67Desechó también la tienda de José as,

Y no escogió a la tribu de Efraín,
68Sino que escogió a la tribu de Judá,

Al monte Sión que Él amaba at.
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